Aquí os pongo una foto de la actriz Cameron Díaz que se le tomó en un acto público y al lado la foto después de haberla pasado yo mismo por el taller de chapa y pintura (je, je). Los colores y efectos suavizados están un poco exagerados, pero la idea era que se viera notablemente la diferencia. Si nos paramos a observar las fotos que aparecen publicadas en las revistas, veríamos como se parecen más a la segunda que a la primera, es decir, con la piel totalmente fina, sin imperfecciones, sin brillos, etc... o sea, más tuneadas que los coches de "The fast and the furious" o como se llame la peli.
¿Tú cómo lo ves?
P.D.- Otro día le tendré que dedicar una entrada a los maestros del maquillaje, que también tienen su mérito.
5 comentarios:
Aún sin maquillar y sin retocar es guapa la muchacha creo yo, aunque va teniendo unas arruguitas de madre ya...
Eso no lo podemos negar. Siempre es más fácil que quede bién un retoque si la base es buena, porque si no lo es, como se suele aunque la mona se vista de seda, mona se queda
Es verdad que cuando miras muchas fotos de retoques seguidas, aprendes a diferenciarlas bastante y ya te especializas en diferenciar si algo puede estar retocado o nó. Creo que la piel es una cosa dificil de retocar y que no se note.
Estás hecho un artista, te voy a pasar una mía para que me la retoques y ponerla en el curriculum, que siempre ayuda.
Lucía, eso esta hecho. Tu dime como la quieres que te dejo niquelada :D
Publicar un comentario