Que la semana tiene 7 días, eso lo sabe todo el mundo, pero siempre hay dos días que son especiales para todos. Por orden de aparición, el primero de estos dos días es además el primero de la semana. Un día ya publiqué una entrada diciendo lo que opinaba del lunes, así que hoy os voy a hablar del viernes.
El viernes siempre es un día especial, y siempre se relaciona con cosas positivas. Para la gente que trabaja o que estudia, suele significar el final de la semana laboral y el inicio del fin de semana. Da igual que el viernes sea el día que más trabajo se acumule, porque todo el mundo quiere tener lo suyo acabado antes de finalizar la semana, que vayas todo el día de culo, de trabajo hasta las orejas hasta la hora de tocar la sirena... si es viernes, no pasa absolutamente nada. Esto, por curioso que resulte, se repite una semana tras otra, trabajes en lo que trabajes. Pero si estàs estudiando, tampoco cambia mucho la cosa: el profe de turno empieza a dar clase a toda leche para acabar el tema y la semana siguiente empezar tema nuevo, o cosas parecidas.
Pero más curioso todavía resulta que a pesar de saber que va a ser un día muy chungo y con mucho curro, cuando suena el despertador y te levantas por la mañana piensas "Por fín es viernes".
Lo que si que està claro que a todos nos gusta y eso es más comprensible es cuando en viernes, llega la hora de salir de clase, el trabajo, etc... Ahí la alegría se desborda. Da igual que te espere un fin de semana ajetreado, con albañiles en casa, trabajando para algún familiar todo el fin de semana y encima sin ver un duro, o simplemente tirarte todo el fin de semana en cama con la gripe (nada extraño estos días). Ese momento es mágico y nada ni nadie puede evitar esa inmensa alegría .
A continuación os pongo un video en el que se puede observar claramente este momento, y más si lo comparamos con la entrada al curro en lunes. Altamente recomendable (aunque no imprescindible, pero casi) conectar los altavoces.
¿Tú cómo lo ves?
3 comentarios:
Jaja ¿qué hace el oso ese?
Yo siento no poder identificarme con este post, puesto que trabajo en hostelería, y para mi, los viernes supone que me espera el fin de semana y que los viernes la gente sale de marcha y me toca trabajar más.
Los que trabajamos en restaurantes, funcionamos al revés. Yo por ejemplo, suelo librar los lunes. En fin, el mundo al revés.
Me encanta este video, me lo envió un amigo hace un tiempo y estuve riéndome sola todo el día y cada vez que me acordaba.
A mí me gustan los viernes por la tarde, cuando ya has terminado de verdad ... y se presenta todo el fin de semana por delante, aunque como mi novio trabaja los fines de semana vivo inmersa en una especie de contradicción.
O sea Lucía, que tú cuando sales del trabajo el viernes estás a medio camino entre el pingüino y el oso, ¿no?
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